FINALIZACIÓN DEL MES DE LA FAMILIA (07-11-14)

Querida comunidad del Colegio La sagrada Familia 

   Finaliza hoy el mes de la Familia, un mes que la institución toda vive de manera muy particular. Un mes que especialmente nos invitó a reflexionar y revisar cómo está nuestra relación y nuestros sentimientos con los miembros que integran nuestras familias, con cada una de esas personas que comparten nuestras vivencias y situaciones, nuestras alegrías y frustraciones, nuestro diario vivir.

   Sin olvidar que familia es el nosotros de la intimidad y del afecto, es la mesa de todos los días, el pan, el niño, la visita, el abuelo y los silencios. Es aprender a decir “papá” y vislumbrar a Dios presente, es decir una y otra vez “mamá” y recibir de regalo mil sonrisas.

   Recordando que una familia es crecimiento cotidiano, adolescencia, discusión, caricia, conflicto, permiso, castigo y reconciliación. Es pedir perdón tantas veces… y volver al amor tantas veces… Y necesitarse unos a otros tantas veces…

   Si imaginamos nuestro transitar por la familia podemos decir que familia es un día el matrimonio, y otro día el nacimiento y la enfermedad y el colegio, y un amor, y un trabajo, y un juguete, y una casa, y el paseo, y las decisiones, y otros hijos y el primer nieto y mil sorpresas diarias.

   No desaprovechemos entonces, esta hermosa oportunidad que nos da la vida,

* para decirles a papá y a mamá cuánto los queremos, aunque algunas veces discutimos o nos cuesta entendernos.

* para darles gracias a nuestros hermanos por caminar a nuestro lado compartiendo nuestras penas, alegrías o preocupaciones y también alguna disputa por quién se baña primero ó quien lava los platos hoy.

* para expresarle a nuestros hijos lo maravillosa que es la vida desde su llegada y todo el inmenso amor que les tenemos.

* y sobre todo para decir: ¡gracias Dios Padre por tan valioso regalo!


Para finalizar, quiero decirle a nuestros egresados especialmente, que siempre habrá situaciones difíciles para nuestras familias, pero está en nosotros, en nuestros principios y en nuestra formación, las armas para defenderla y para saber que la familia es el bien más preciado que tenemos y que en ella encontraremos contención, abrigo y el amparo que necesitemos para seguir adelante.

Que de la mano de la Sagrada Familia de Nazaret, nuestras familias crezcan en amor y armonía; y seamos cada vez más semejantes a ella.

Muchas gracias.