Felicidad
falsa no es felicidad, es ilusión.
Pero,
si yo supiese hacer cuentas para medir el bien diría que la felicidad sí puede
tener tamaño, puede ser grande, o pequeña, tan pequeñita que puede caber en la
palma de una mano, pero, también puede alcanzar el tamaño del mundo.
La
felicidad es sabiduría, esperanza, deseo de ir, de quedarse, es presente, pasado
y futuro.
La felicidad es confianza: creencia, trabajo y acción.
No
se puede tener prisa para ser feliz,porque ella viene bien despacito, como quien
nada quiere.
Ser
feliz no depende del dinero, tampoco depende de la salud, ni del poder.
La
felicidad no es fruto de la ostentación ni del lujo.
Felicidad
es desprendimiento, no es ambición.
Solamente es feliz quien sepa soportar,
perder, sufrir y perdonar.
Sólo es feliz quien sepa, sobretodo,
amar.
¡Gracias Álvaro Maidana!
Noelia Renfiguez
ResponderEliminarcreo que estas son las historias que cuando las lees te queda algo muy importante y aparte que te sirve...